Los Sobrinos

Retomando el tema cuando Lupillo trabajaba de repartidor de productos mexicanos en San Diego California. Con una mentalidad mas madura dejo de soñar poniendo los pies sobre la tierra, se dedico a chambear arduamente para brindarle a su familia una vida estable y segura.

Así después de 20 años viviendo una "vida normal", viendo crecer a sus hijos hasta que cada uno de ellos se casó y se fueron a hacer una vida aparte. Cuando su última hija se casa, Lupillo sintió que su compromiso y responsabilidad había terminado para si mismo y para los que lo rodeaban. Lupillo: “trabajé como camello –por no decir burro- pero estaba contento por que la familia y yo no padecimos necesidades”. Con la comezón de volver a pulsar su guitarra Lupillo empezó a frecuentar a sus sobrinos -que también son músicos- Jesús y Martín Hernández, practicaron juntos algún tiempo y presentaron algunos conciertos. Así fue como empezó su nuevo retorno.

Lupillo´s Trío en plena acción reforzados con el

percusionista “OMAR” de nacionalidad Sudafricana.

Chuy y Martín empezaron con la vocación musical desde la niñez ya que crecieron en ese ámbito, Lupillo vio que lo traían en la sangre y los encamino dándoles algunos consejos para el desarrollo de técnicas de ejecución instrumental.
LUPILLO ellos llevan la música por dentro y me da mucha satisfacción que hayan sido mis discípulos, ver que han realizado algunas metas que se han propuesto, como la de ir a varios países de Europa con su grupo de Rock MERCADO NEGRO.

MARTIN............................... JESUS

Hijos de Jesús Hernández quien les ha brindado soport desde sus inicios
Chambeador, proveedor hombre sencillo un admirable jefe de familia

(Jesús hermano mayor de Lupillo)

“Don Chuy” echándose un desahogue a la COLTRANE

EL NOPAL espacio de expresión Jazzista que presentaba semana con semana lo mejor en aquellos días 1990 al 2000.

Tijuana carece últimamente de lugares apropiados para la difusión del Jazz (El tamborazo es lo que rifa).
Entre esos pocos lugares raros esta un centro cultural independiente llamado “EL NOPAL” un lugar muy reservado de excelente prestigio propiedad de Adelaida del Real ferviente amante del Jazz.
Hoy en día ella da apoyo impulsando a nuevos valores artísticos en el ramo musical romántico y de trova. De vez en cuando en sus programas incluye un buen grupo de Jazz, esto se debe a que la afición no crece y tiende a disminuir el gusto por esta música maravillosa entre los tijuanenses.